Aunque el tiempo transcurra de prisa, la Navidad nos deja eternos instantes
Y así, llega la navidad!
Muchas personas me han preguntado cómo he logrado
sobrellevar algunas tragedias sucedidas durante esta época. Para mí no fue fácil,
pero si les puedo decir que gracias a que ya no me afectan el gozo, porque me
he concentrado en los mejores recuerdos y no en los malos. No es fácil, pero de
deprimirme por perdidas irreparables, he llegado a amar tanto la navidad que me
paso de Enero a noviembre esperando este dia. Aquí celebro el cumpleaños de
Jesús y celebro su vida, aunque me digan lo contrario de que fue en otra época y
que no es la fecha real. Con sinceridad no me importa.
Para esta época perdí dos seres muy queridos, pero no les
voy a hablar de perdidas sino de las ganancias que he tenido en esta época en
cuanto a amor y recuerdos felices. En ellos me concentre para no ser una
pesadilla para mi misma. Esos buenos recuerdos han hecho que sea mi época favorita,
una celebración a la vida y no a la muerte.
Mi abuela Maria es el mas hermoso recuerdo que tengo de la
Navidad. Por una casualidad de la vida, mi abuelo se llamaba Jose…. Sin mentirles!!
Bueno, pues las mejores navidades y el mejor de los sentidos de la misma, lo aprendí
de esta mujer, quien esperaba a sus hijos para celebrarla.
De todas partes, el único dia que se podía ver la familia completa
era el 24 de diciembre. En casa de mi abuela comenzaba una bacanal de comida
desde la mañana. Las ayudantes de ella y mi madre, se levantaban muy temprano a
preparar los manjares de la cena. Uno por uno, llegaban los hijos con sus
descendientes y el gran patio se llenaba de risas alrededor de un puerco enorme
que se asaba suavemente en una puya. El patio se llenaba de olores, los tios
jugaban al domino, y las tias chismeaban en la cocina mientras ayudaban a
preparar la cena mas pantagruélica del anio. Debo confesar como siempre, que la
familia no escatima cuando se trata de comida.
Alli se podían ver el cerdo asándose, pollos asados y
guisados, una res que se cocinaba de diferentes maneras y hasta guineas. La
cocina se llenaba con enormes calderos con arroz de varios tipos, Moros de
habichuela negra, guandules, fiesta… Se cocinaban cantidades industriales y eso
sin contar los demás acompañamientos, que consistían en ensaladas variadas,
rusa, verde y dulce, las castañas asadas y hervidas, el lerén y siempre aparecía alguien también con un
pavo, como si no hubiera suficiente carne. Las manzanas, uvas, peras, pasas,
dulces navideños y demás, se traían por sacos desde Santo Domingo porque éramos
muchos. Jamás llegue a probarlo todo porque tanta comida durante el día para
cualquiera era mucho.
Mi abuela antes de la cena, reunía a los nietos, nos daba
una especia de batea cargada de los diferentes manjares preparados, y con ella
nos dirigíamos a las personas menos afortunadas, quienes eran los beneficiados
de tanto derroche. Ella siempre nos comentaba que había que dar, y nunca lo que
sobraba, porque entonces no sería Dar. Y así hacíamos el recorrido casa por
casa. Y luego por fin, nos reuníamos todos con los demás y comíamos a destajo,
y aun con todo, sobraba para varios días.
Luego que mi abuela muriera, todo el sentido de la navidad
paso a segundo plano. Ya no habían grandes reuniones, pero nos la arreglamos
para al menos pasarla juntos cada familia por su lado. En cuanto a mí, me gusta
preparar mi propia cena , pues cuando me case, teníamos problemas con decidir
con que familia pasarla, si la de mi esposo o la mía. Viniendo de tanta tradición,
mi madre no lo entendía, y mi suegra tampoco, así que tuve la idea salomónica de
no pasarla con ninguno, y pasarla dentro de mi nueva familia, que aunque corta,
era mi familia. La primera vez que lo hice, me gusto tanto poder disponer del menú,
que ya no me imagino ser invitada otra vez. Las veces que he cedido a una invitación,
he terminado con tremenda decepción, porque muchos no siguen la tradición de
las comidas y termino haciendo una el día 25.
Aunque no he podido recrear el menú de antaño, me he apegado
al tradicional de mi familia, la De Jesus Hidalgo, y se ha hecho tradición
entre nosotros, que aunque éramos solo 3, comenzábamos a planificar el menú desde
noviembre. Ahora con los nietos, se han revivido los recuerdos de compartir
entre familia, y de los regalos debajo del árbol que tanto le gustaban a mi
hija y sobrinas. No hay disfrute mayor!
A continuación, les dejo mis recetas favoritas, para los que
como yo, iniciaron su propia navidad. Les aseguro que con estas recetas no van
a equivocarse!
Pernil a mi manera
1 pierna de cerdo de 15 libras
Para marinar desde la noche anterior necesitaremos:
1 cebolla cortada en dos
1 cucharada de oregano seco
1 cabeza de ajo cortada en dos mitades
1 taza de jugo de limón
1 taza de jugo de naranjas agrias
4 cucharadas de azúcar
¼ taza de sal
8 tazas de agua o las que necesite para cubrir
Instrucciones:
En una olla hervir el agua junto a la cebolla, ajos,
oregano, sal, azúcar, pimienta sin moler. Luego de que haya hervido y enfriado,
agregar el jugo de naranja y el jugo de limón, reserve.
Sazón adicional
6 dientes de ajo bien machacado
3 cucharadas de orégano seco
1 cucharada de sal gruesa o kosher
El jugo de 1 limón y una naranja agria
Pimienta al gusto
Preparación:
Mescle bien todos los ingredientes, haciendo una especie de
pasta aguadita. Reserve.
Preparación del
pernil
Limpie bien la pierna de cerdo, verifique que no le queden
pelitos por ningún lado. Séquela con un paño y póngala en un recipiente donde
se pueda tapar y cubrir toda la carne. Haga cortes en la piel en forma de
rombo, sin llegar nunca a la carne. Bañe la carne con la salmuera que
preparamos y hervimos con anterioridad, y llévelo a la nevera por 1 dia. Luego
de pasado el dia Saque la pierna y quite todo exceso de agua. De ser necesario,
póngala en una rendija y luego unte por debajo de la piel y por el hueso el
sazon preparado. Lleve al horno tapado tomando en cuenta que por cada dos
libras, es una hora. Luego destape, y retire el exceso de liquido, procurando
bañar de vez en cuando el pernil hasta que este totalmente dorado y se vaya
desprendiendo la carne del hueso.
Dejela reposar por media hora antes de cortarla. Sirva con
una reducción del liquido donde se cocino, con un poco de vino blanco.
Arroz a la Mamajuana
Ingredientes:
2 libras de arroz
1 taza de pasas
1 manzana cortada en cubitos
1 zanahoria rallada
½ litro de caldo de pollo o vegetales
1 cebolla picada
1 diente de ajo machacado
1 taza de avellanas y coquitos
1 taza de apio
2 plátanos maduros fritos y picados
1 taza de mama Juana
Preparacion:
En una cacerola para arroz, sofreir la cebolla, el ajo y el
apio en una 4 cucharadas de aceite de oliva. Agregue el arroz y revuelva hasta
que este bien cubierto. Agregue el caldo de pollo, y remueva bien. Cuando se
seque, agregue las manzanas, las pasas y las nueces, al mismo tiempo que la
zanahoria rayada. –revuelva bien- y agregue la taza de Mamajuana. Tape y baje
el fuego hasta que el arroz este cocinado. Agregue los plátanos maduros fritos,
y revuelva. Adorne con puerro picadito y algunas nueces.
Pastelón de berenjenas y plátano maduro
4 berenjenas guisadas a su gusto
8 plátanos grandes maduros, salcochados
½ barra de mantequilla
½ libra de queso mozzarella
Preparación:
Haga un puré con los plátanos maduros y la mantequilla. Tenga
las berenjenas guisadas a su gusto aparte,
y ralle el queso mozzarella. En un molde engrasado, ponga una capa de puré
de plátano maduro, cubriendo bien el fondo. Luego una capa de berenjena
guisada, y otra capa de plátano maduro y queso hasta finalizar con lo que nos
queda del queso y lleve al horno a gratinar.
Ensalada rusa
2 libras de papas hervidas y picadas en cubos
1 libra de Remolacha o Betabel hervido y picado en cubos
¼ taza de mayonesa
¼ taza de crema agria
El jugo de un limón
1 latita de petit pois
1 latita de maíz tierno
2 cucharadas de aceite de oliva
1 tomate Barceló picado pequeñito
Media cebolla picada pequeña
Medio aji cubanela picada pequeña
2 huevos hervidos picados en cuadros
Sal y pimienta al gusto
Preparación:
Haga una vinagreta con el limón, el aceite de oliva, la sal
y pimienta, la cebolla, tomate y ají, todo picado muy pequeñito. Reserve.
En un recipiente, una las papas, zanahoria, los petit pois,
el maíz y el huevo. Sazone con la mitad de la vinagreta preparada y revuelva.
Por último, añada la remolacha junto a la mayonesa y la crema agria. Revuelva hasta
que todo esté integrado y lleve a la nevera hasta el momento de servir.
Complete la cena con Pasteles en hoja, telera, pastelitos,
kipes y turquitos rellenos
Pie de manzanas y
peras.
Masa para pie
Dos tazas de harina
Media barra de mantequilla
1 cucharadita de baking soda
Un chorrito de leche
5 cucharadas de azúcar
Una pizca de sal
½ cucharadita de vainilla
½ cucharadita de canela en polvo
Para el relleno:
3 manzanas peladas y picadas en fetas
1 pera picada en fetas finas.
1 ½ taza de azúcar morena
1 cucharada de harina
1 cucharada de canela
½ barra de mantequilla.
Preparación
Cierna la harina junto al polvo de hornear, agregue el azúcar
y la pizca de sal. Luego agregue la mantequilla en trozos, la canela y la
vainilla. Vaya agregando la leche y amasando hasta que tenga consistencia y no
se pegue en las manos. Divida la masa en dos partes, envuélvala en papel film
por una hora en un lugar fresco.
Pique las manzanas y peras, y agréguele un chorrito de jugo
de limón para que no se oxiden. Agregue la canela y el azúcar moreno y la
cucharada de harina y déjelas a un lado. Enmantequille y enharine un molde
redondo para pies. Con un rodillo, en una superficie enharinada amase una de
las dos partes de la masa, hasta obtener una masa fina y cubra el fondo del
molde con la misma. Agregue la mescla de manzanas que ya preparo, y corte
algunos trocitos de mantequilla y póngaselos por encima a la mescla. Amase la
otra mitad de la masa con un rodillo y cubra el pie con la misma, procurando
hacer algunos cortesitos encima de la misma. Pinte con mantequilla derretida y Hornee
a 250 grados por media hora, o hasta que la corteza este dorada. Déjela reposar
otra media hora antes de servir.
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